martes, 18 de marzo de 2014

Zen: la Atención Plena



Por Dokushô Villalba Roshi.



Resumen de una conferencia del maestro:

El punto de partida de la búsqueda espiritual de Buda es la AFLICCIÓN: constatación de la aflicción que todos los seres humanos experimentamos por el hecho de estar vivos por el hecho de existir.

La principal causa de la aflicción es la IGNORANCIA: no luminosidad, no claro: estado mental confuso, en el que no hay un percepción clara de nuestra verdadera existencia.

Para acabar con esa aflicción hay que transformar el estado de ignorancia: velo, niebla que empaña la visión de la verdadera realidad, conocimiento deficiente E IMPRECISO y limitado de la realidad del mundo en el que vivimos, defectuoso. Fruto de esa torpeza existencial generamos estados aflictivos tanto en nosotros como en las personas que nos rodean. Gran parte de nuestro proceso cognitivo sucede de forma inconsciente: no entendemos por qué nos pasa lo que nos pasa.

Somos bio-computadoras que hemos sido programadas a través de la cultura y la genética para percibir la

lunes, 17 de marzo de 2014

El tema del día: la Risa / La práctica de las Alegrías

Tomároslo con humor: (Por Mariano Alameda.)

La espiritualidad no es exactamente quedarse como un ficus haciendo la fotosíntesis sentado en un zafú con media ronrisa de alelado esperando que la masa ignorante te rinda pleitesía por tu superioridad. 

La espiritualidad no es fingirse dulce y amoroso, mirar con ojitos de cordero al mundo y reprimirse todas las emociones censurables.

La espiritualidad no es un camino que vaya a ningún sitio, porque de la espiritualidad no se puede salir.

La espiritualidad no es vestirse de la semana oriental del corte inglés, no es decorar la casa con tres telas de mercadillo Ibiza para que, junto al incienso, parezca algo cool.

La espiritualidad no es una elección que puedes hacer, no es un camino que elegiste tomar.

La espiritualidad no es adquirir poder para tener un chalet más grande, no es conseguir que el universo sea tu

viernes, 4 de octubre de 2013

¿HASTA CUANDO DORMIDO?


Era un pueblo de la India cerca de una ruta principal de comerciantes y viajeros. Acertaba a pasar mucha gente por la localidad. Pero el pueblo se había hecho célebre por un suceso insólito: había un hombre que llevaba ininterrumpidamente dormido más de un cuarto de siglo. Nadie conocía la razón. ¡Qué extraño suceso! La gente que pasaba por el pueblo siempre se detenía a contemplar al durmiente.
?Pero a qué se debe este fenómeno?
-se preguntaban los visitantes -. En las cercanías de la localidad vivía un eremita. Era un hombre huraño, que pasaba el día en profunda contemplación y no quería ser molestado. Pero había adquirido fama de saber leer los pensamientos ajenos. El alcalde mismo fue a visitarlo y le rogó que fuera a ver al durmiente por si lograba saber la causa de tan largo y profundo sueño. El eremita era muy noble y, a pesar de su aparente adustez, se prestó a tratar de colaborar en el esclarecimiento del hecho. Fue al pueblo y se sentó junto al durmiente. Se concentró profundamente y empezó a conducir su mente hacia las regiones clarividentes de la consciencia. Introdujo su energía mental en el cerebro del durmiente y se conectó con él. Minutos después, el eremita volvía a su
estado ordinario de consciencia. Todo el pueblo se había reunido para escucharlo. Con voz pausada, explicó:
--Amigos. He llegado, sí, hasta la concavidad central del cerebro de este hombre que lleva más de un cuarto de siglo durmiendo. También he penetrado en el tabernáculo de su corazón. He buscado la causa. Y, para vuestra satisfacción, debo deciros que la he hallado. Este hombre sueña de continuo que está despierto y, por tanto, no se propone despertar.
*El Maestro dice: No seas como este hombre, dormido espiritualmente en tanto crees que estás despierto.