VIVIR EL PRESENTE

La historia de Tanzan y Ekido, dos monjes Zen que caminaban por un sendero rural anegado a causa de la lluvia ilustra maravillosamente la incapacidad o la falta de voluntad de la mente humana para dejar atrás el pasado. Cuando se acercabana una aldea, tropezaron con una joven que trataba de cruzar el camino pero no quería enlodar su kimono de seda. Sin pensarlo dos veces, Tanzan la alzó y la pasó hasta el otro lado. Los monjes continuaron caminando en silencio. Cinco horas después, estando ya muy cerca del templo donde se alojarían, Ekido no resistió más. "¿Por qué alzaste a esa muchacha para pasarla al otro lado del camino?" preguntó. "Los monjes no debemos hacer esas cosas". "Hace horas que descargué a la muchacha", replicó Tazan. "¿Todavía llevas su peso encima?" Imaginemos cómo sería la vida para alguien que viviera como Ekido todo el tiempo, incapaz de dejar atrás las situaciones del pasado, acumulando más y

NUEVA MIRADA

Pensamientos y sentimientos negativos son simplemente formas de amor bajo presión. Cada acción que tomas y cada palabra que dices es una expresión de amor. La ira, la tristeza, la avaricia y la culpa son formas de energía que originalmente vinieron del amor, sin embargo fueron distorsionados por la mente. Si observas de cerca, encontrarás que todo en el Universo procede del Amor. Esto puede ser una idea difícil de digerir y complicada de implementar en tu sistema de creencias personales, pero os invitamos a probar estas nuevas gafas de prescripción "amor" por una semana o dos. El más mínimo cambio en la perspectiva de aquello que nos acontece puede cambiar dramáticamente todo!